El objetivo de este libro es reflexionar sobre el arte y los artistas. En Japón, el arte va unido indisolublemente a un camino interior "Do", vía, sendero. El gran Maestro del Té Rikyu decía: "El arte del Camino del Té consiste simplemente en hervir el agua, preparar el té y beberlo". Así de sencillo y a la vez así de complejo. Un elemento común al Zen y al Arte del Té es la constante atención que prestan a la sencillez. La Ceremonia del Té describe una forma de vivir ajena a las presiones de la vida exterior.